"Hoy vas a entrar en mi pasado en el pasado de mi vida", cantó sin voz y se quedo dormida.
El viejo eco de los golpes los golpes que te demolieron y aquellas piernas largas hasta el cielo. Y la tristeza te buscaba tocó tres veces y se fue no tuvo tiempo de quedarse a ver tu cara y se marchó al otro lado del dolor.
Las trece ultimas palabras las que te hieren como balas a veces pueden ser como las armas.
Y la tristeza te buscaba tocó tres veces y se fué no tuvo tiempo de quedarse a ver tu cara y se marchó al otro lado del dolor.
"Hoy vas a entrar en mi pasado en el pasado de mi vida", cantó sin voz y se quedó dormida.
Las trece ultimas palabras las que te hieren como balas a veces pueden ser como las armas.